sábado, 12 de enero de 2013

Nuestra primera vez


Parece que fue ayer

Los hijos cuando llegan a la adolescencia siempre preguntan

-¿Cómo os conocisteis papa y tú?-

Sonrío y busco  a papi con la mirada y aclarándome la voz empiezo con  el recuerdo de nuestra primera vez.

Empecé mi trayectoria profesional  trabajando en prematuros, hasta que solicite un traslado a la UCI de adultos.

Para empezar me destinaron al servicio de Semi-Intensivos y me dieron las habitaciones  401 y 402 con tres boxes cada una.

Llegue asustada  y nerviosa. Estas habitaciones eran las quirúrgicas y no dominaba el tema. Me sacaban de “mis peques” y era enfermera muerta.

Leí las gráficas de los pacientes y busque más información en el historial clínico para situarme mejor, pero antes de darme cuenta, alguien dijo:

-¿Quién lleva la uno?-

Levante la mirada.

-Están pasando visita-

Me fui pitando para la habitación con el carro de curas y las gráficas bajo el brazo.

Cuando abrí la entornada puerta en la 401.3 vi al doctor sentado en la cama y  de espaldas a la puerta. Me sobrecogió lo que vi.

Tenía cogida la mano de una anciana absolutamente postrada, comatosa y terminal por una neo de colón.

Le hablaba en voz baja y le explicaba la necesidad de explorarla asegurandole que no le haría daño. Que debía tocarle la barriga y ver la zona de “la bolsa”.

En aquel momento se incorporó de la cama y se dio la vuelta. Al momento levanto su mirada hacía mí ……y …… literalmente ……. “se me cayeron las bragas”.

Dios¡¡¡¡¡¡

Un morenazo de ojos verdes que echaba para atrás y una sonrisa de infarto   …..

Muerte súbita ¡¡¡¡

Aquí mis hijos contienen la respiración y papi levanta sus cejas y mirando por encima de sus gafas dice -¿ah sí?, ¿se te cayeron las bragas?-

Le saco la lengua y prosigo.

El mágico momento quedo roto por un -¿Curamos?-

Me acerque con el carro. Abrí un equipo de curas estéril y un paquete de gasas. Mientras,  el hacía una turunda para limpiar la zona.

No podía dejar de  mirarle. Iba de su perfil a su nuca y de su nuca a sus manos ….

Dios ¡¡¡ . ……. “Se me caía la baba” ……

Alargo la turunda hacia mi y dijo  - Yodopobidona-

Le moje la gasa, pero al ir a aplicar la turunda sobre la zona, se encontró con que no había rastro de Yodo en ningún lugar.

Me miro, y miro su bata, sus pantalones y sus zuecos.

Bañadito en Betadine  ¡¡¡¡¡  …. marrón , marrón ……

 -¿Que mirabas?-

-¿Qué, que?- dicen los chicos expectantes

Y yo roja como un tomate pero muy digna conteste:

-A ti-

Silencio sepulcral

Cuando acabo, se sacó los guantes, me miró y pregunto:

-¿Sales a las tres?-

Solo supe asentir con la cabeza como un perrito de trasera de coche.

-Espérame, tomaremos un café-

Y de esto ya hace 26 años,  pero  ……



Parece que fue ayer








4 comentarios:

  1. De todas las historias que salen aquí estas son las que más me gustan! Y como ya conoces bien mi flower-power puedo confesar que se me ponen los pelos de punta y q mas de una vez me emociono y acabo soltando alguna lagrimita (como ahora☺)!!

    Besitosss!!!

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  2. jajajajaj es como el guion de una película de esas de comedia romántica americana, ME ENCANTA!!!!!!

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  3. Me encanta. Bonito comienzo para una historia de amor como la vuestra!! Te he imaginado en mi mente sacando la lengua...jeje!! Es un gesto muy simpático y tan tuyo...

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  4. Una historia muy bonita y lo mejor es como lo cuentas.jejeje
    Me gustó mucho.

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