No entiendo a la gente que le
aburren los aeropuertos y los viajes en avión
Llegamos al aeropuerto un par de
horas antes del embarque.
Por suerte la puerta de salida estaba justo enfrente
de la cafetería y con un periódico, un café amén de observar las tribus urbanas
y los cientos de asiáticos que no paran de viajar, el tiempo pasó muy rápido.
Aparece una azafata de tierra y
toda una marea de gente se levanta y se pone en fila india a punto de embarcar,
a los diez minutos salen por la puerta de embarque los pasajeros del nuestro
vuelo que acaba de llegar.
Aún debemos esperar media hora
para que nos den acceso al avión.
Se oye por megafonía
-Procederemos al embarque del
vuelo 1882. Pasajeros con niños y pasajeros con dificultades para la movilidad
en primer lugar-
Unas 10 parejas con cochecitos y
bebes se adelanta y una media docena de sillas de ruedas también.
La fila empieza a resoplar, el
embarque se enlentece y la gente lleva casi una hora de pie haciendo cola.
-Procederemos al embarque.
Primero los pasajeros de las filas 16 a la 31-
Gente del final de la fila con
sonrisa de triunfo, se adelanta para
pasar los primeros y los que estaban delante rezando por lo bajo no mueven ni
un centímetro su equipaje de mano solo para fastidiar.
Algún que otro avispado hace una
intentona de pasar con el primer grupo y es rechazado con modales poco
femeninos por la azafata del mostrador.
Pregunta:
-¿Hacer dos colas según fila de
asientos es tan complicado?-
Llegamos a nuestro asiento y una
dulce anciana sentada al lado de la ventanilla me sonríe.
Y, Santa María Madre de Dios
¡¡¡¡, estoy rodeada por parejas con bebes y niños pequeños.
La niña de delante se pasa el
viaje de pie sobre el asiento mirándome e incitándome para que juegue con
ella y su mono pegajoso y sucio.
La de atrás no para de moverse y
empujar mi silla una y otra vez.
Su hermanita llora la mayor parte
de viaje, haciendo perder la paciencia de la madre hasta que no distingo si la
del berrido es la bebe o la madre.
La dulce ancianita tiene
dificultad para abrir la cremallera de una bolsa de viaje que ha dejado en el
suelo, a cada esfuerzo emite gases que fluyen en el ambiente y me obligan a
contener la respiración para no morir intoxicada.
Al final consigue su objetivo y
saca toda una colección de bolsas de plástico llenas de fruta, galletas y
chocolatinas.
Se decide por una naranja y el
proceso de pelado y comérsela gajo a gajo con su desplazada dentadura postiza es
de película gore.
Aunque lo peor fue que SOLO se
levantó tres veces para ir al baño.
Pregunta:
-¿Por qué a todos los “insersos
meones” se les facilita el asiento de ventana?-
-Porque en caso de emergencia no
pueden obstruir las salidas-
-¿Defíname emergencia?-
Pregunta:
-¿Porque reparten todos los bebes
y niños por el avión en lugar de ubicarlos a todos juntos?-
Entre unos y otros el tiempo se me paso ...... VOLANDO ¡¡¡¡
No entiendo a la gente que le
aburren los aeropuertos y los viajes en avión
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