Una pareja de cuatro

Formaban una pareja peculiar y llevaban juntos toda una vida.

Cuando se conocieron ella no era más que una chiquilla. Morena, voluptuosa y divertida. Él, un interesante canoso amante de las juergas y profesor de derecho penal.

Desde el primer momento que Mª Jesús piso la facultad supo que Manuel iba a cambiar el rumbo de su vida.

Formaban una pareja singular, los separaban treinta y tres años, pero esto no impidió que estuvieran juntos toda una vida.

Durante las duras horas en vela acompañando a su amado en los postreros días de su vida, Mª Jesús  fue contando lo que realmente la ató tantos años a él.

-Fue un marido estupendo -explicó – atento y generoso que me hizo crecer como profesional y como mujer. A su lado viví momentos de auténtico placer-.

-Lo entiendo, vivir con alguien tan culto es un lujo-

-Querida, hablo de sexo-aclaró- hablo del mundo swinger-.

-¿perdón?, ¿el mundo de quién…?-

Mª Jesús me miro detenidamente y note que me estaba analizando. El tiempo se me hizo eterno y no supe muy bien que se esperaba de mí, tenía que hacer algo, pero ¿qué debe hacer una enfermera  ante situaciones de esta índole?, y, opte por permanecer callada y mirarla de frente.

-Hablo de intercambio de parejas, de tríos, de orgías… y al final de su vida de voyerismo- remato con un suspiro-.

-Ah!!!, lo siento, yo no sé, es que yo…-

Pero Mª Jesús quería hablar de ello. Su recuerdo la mantenía unida al anciano postrado en la cama del hospital, y sin soltarle la mano inicio un relato.

-Empezamos un verano en Cap d’Age, en los 80, ciudad para naturistas y fue todo tan fácil ¡!! –

Mª Jesús se quedó callada,  con mirada ausente y una leve sonrisa en los labios, como quien recuerda ..

-Manuel compartía su sexualidad con otras parejas. Le excitaba el juego, el deseo y la atracción, y, me inicio en el ambiente de las relaciones liberales –

Los swingers  no son un invento actual. En la antigua Grecia, las fiestas y las comedias celebradas en honor al dios Dionisos se caracterizaban por el erotismo. Las orgías se desarrollaban en la noche del solsticio de invierno, en la que hombres y mujeres se disfrazaban de sátiros y ninfas. En ellas, más de uno se atrevía a indagar en inéditos caminos de la sexualidad que en circunstancias normales nunca hubiera soñado recorrer. (Amor y sexo en la antigua Grecia de Juan Eslava)

-Pero, ¿nunca se planteó la posibilidad de enamorarse de otro hombre o su esposo de otra mujer? –

-Puede suceder si la pareja no tiene una base sólida, pero nosotros teníamos mucha complicidad y un gran respeto mutuo, reconociendo y aceptando nuestras  necesidades y carencias -

Empezaba a entender, aunque seguía siendo algo nuevo para mí envuelto en una aura de misterio y secretismo.

-¿Nunca se sintió culpable?, ¿nunca tuvo celos?-

-Yo quería hacerlo feliz, y él quería para mí lo mejor. Cuesta entender culturalmente que una pareja pueda tener una relación tipo abierta, pero pensamos que el sexo no es algo prohibido. Lo vivimos como algo natural, sin tabús.-

Durante las duras horas en vela acompañando a su amado en los postreros días de su vida, Mª Jesús  fue contando lo que realmente la ató tantos años a él.

Fue por Amor.

Ahora es cuando mis hijos me dicen -Ja!!!,  menudo pasteleo de post!!- y  papi añadirá -¿Por qué dices amor cuando quieres decir sexo?-. 

Las Ladies opinaran cada una según su estilo, -que ser enfermera es “pa” no aburrirse nunca!!!, que Ole!!! por sus cojones, que si yo con el mío me sobro y me basto, que adonde hay que ir - y …..

El  sexo entre dos es hermoso, pero entre cinco es fantástico

Pero, lo que nadie podrá negar es de que formaban una pareja peculiar y llevaban juntos toda una vida.